Estirarse para vivir mejor

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24-10-2019.- Un proverbio chino dice que estirarse, estira la vida y, es fundamental hacerlo todos los dÃas, hagamos o no deporte, de hecho en China en muchas de sus escuelas pÃºblicas destinan una media hora para estos ejercicios, lo cual afirman despeja la mente y prepara a los alumnos para un mejor desempeÃ±o escolar.

Estirarse correctamente es una de las mejores formas de mantener los músculos saludables, aumenta la flexibilidad, mantiene las articulaciones en óptimas condiciones para con el mejor rango de movimiento realizar con mayor facilidad las actividades diarias. Esto en artes marciales conlleva un mejor nivel técnico y ayuda a proteger el cuerpo contra lesiones.

Por excelencia los expertos en ballet son autoridad en elasticidad y flexibilidad, sus especializados ejercicios de elongación y fortalecimiento muscular pueden ser el mejor complemento de todo artista marcial. Un ejemplo de disciplina y nivel en este tema, lo es la Escuela de Ballet Clásico de Alto Rendimiento y Centro de Danza Holístico Bcar, bajo la tutela de la primera bailarina Elsy Cervera, donde se lleva paso a paso a los alumnos para alcanzar su máximo potencial en este rubro.

En ocasiones quienes están empezando a hacer deporte o incluso las personas que llevan algún tiempo no le dan la importancia que merecen los estiramientos, cuando en la práctica son fundamentales para rendir mejor en la disciplina elegida.

Y en el caso de los practicantes del karate por mencionar mi arte marcial base, se debe practicar por lo menos 6 veces por semana, ya que estirarse es como el agua hirviendo, si se deja de calentar ´se enfría’.

Al hacer patadas de giro y de frente a la altura del rostro del oponente, muchas veces se suele hacer por la potencia de los músculos de la pierna aunque no se tenga tanta elasticidad; sin embargo si se añaden ejercicios especializados del ballet, la técnica mejora notablemente y disminuye el riesgo de lesiones. Ser holístico requiere seguridad en sí mismo, pero es el primer paso para atravesar la línea que separa lo bueno de lo excelente.