En esta sesión, se abordaron temas de gran importancia para el bienestar de los trabajadores, que han estado enfrentando condiciones laborales insostenibles.
El Sindicato Progresista a través de su líder expresó su profunda preocupación por las extenuantes cargas de trabajo, la escasez de personal en diversas áreas y los sueldos insuficientes, especialmente para aquellos que se desempeñan en primera instancia.
La falta de pago por horas extras se suma a la inconformidad laboral, lo que evidencia la necesidad urgente de un cambio estructural en el sistema judicial.
La negociación del bono de fin de año fue un tema central, pero también se discutió un incremento salarial para el proyecto de presupuesto del ejercicio fiscal 2025 y la basificación de más de 200 trabajadores que aún carecen de estabilidad laboral. Estas cuestiones reflejan no solo una lucha por mejores condiciones, sino también la búsqueda de que se reconozca la gran labor que todos los días realizan las servidoras y los servidores judiciales.
El sindicato anunció que, de no obtener una respuesta favorable en la próxima reunión programada para el 8 de noviembre, se llevarán a cabo manifestaciones pacíficas para exigir sus derechos laborales fundamentales.
Esta postura resalta la determinación de los trabajadores y trabajadoras del Poder Judicial de alzar su voz y luchar por condiciones más justas.
Es vital que la sociedad y las instituciones reconozcan la importancia de los trabajadores en el sistema judicial.
Sin un personal adecuado, con carrera judicial y que se le respeten sus derechos, la justicia misma se ve comprometida.
"Es momento de escuchar y actuar en defensa de quienes diariamente sostienen la balanza de la justicia."